tenía la oportunidad de ver a Julio de la Rosa convertido de nuevo en el hombre burbuja, pero me he quedado sin verle.
para celebrarlo me he abierto una cerveza negra a las 6 de la tarde (que aún está medio llena) y he estado escuchando las canciones más alegres que he encontrado en el iTunes.
por favor, tengamos en cuenta la ironía.
llorar suele ser un desahogo interior, pero hoy a mí me ha dolido por dentro. sin llegar a localizar el sufrimiento en un punto exacto entre el corazón y el estómago.
normalmente en estas situaciones me suelo poner nostálgica y recordar otros tiempos. tristes, eso sí, pero en su medida. de esos que no sabes si añoras o si te gustaría volver a saborear.
hoy sencillamente me ha dado una rabia terrible haber vivido algunos de los años que tengo.
porque no merece la pena si una se pasa el primer día del verano así.
porque no enorgullece que te digan "independiente ya! con lo joven que eres..".
porque las migrañas son mis compañeras de piso.
mi vida es una canción y no tengo ninguna fuerza para demostrárselo a nadie.